Uno de los sucesos que marcó el 2020, después de la pandemia de COVID-19, fue el asesinato de George Floyd por parte de un policía de Estados Unidos, esta tragedia permitió visibilizar los abusos de poder y violencias ejercidas por parte del cuerpo policiaco en E.E.U.U.
Lo sucedido con George Floyd no fue un caso aislado, la policía americana está llena de reportes de abuso de poder y asesinato a civiles, muchos de ellos ligados a temas de racismo y xenofobia. Esto provocó una gran cantidad de protestas y disturbios dentro del país en contra de su presidente de en ese entonces, Donald Trump.
Con respecto a los números de violencia policiaca, un estudio hecho por APHA (Asociación Estadounidense de la Salud Pública por sus siglas en inglés) durante el 2016, 76 mil 400 personas sufrieron alguna herida durante una intervención legal de la fuerza pública; para el 2018 ese número había alcanzado ya las 85 mil personas.
También en el 2016 se hizo un registro donde al menos mil 91 personas murieron por algún tipo de conflicto policiaco, el millar de personas es una cifra constante en esta clase de incidentes que se ha mantenido durante los últimos 10 años. Esto representa un aproximado de 54 mil 754 años de vida perdidos.
Un estudio llamado “Muertes por uso de fuerza letal por parte de las fuerzas del orden” la sexta causa de muerte de hombres entre 25 y 29 años es el confrontación con policías. Esta cifra aumenta a 2.5% más de probabilidad cuando se es afrodescendiente
Para trabajar esta problemática, es necesario atender con urgencia las necesidades del pueblo estadounidense, y preparar y equipar mejor al cuerpo policiaco. Esta es la razón por la que a estas acciones se les ha catalogado como un problema de salud pública, porque mientras la policía no tenga un cambio, los traumas que generan sus acciones seguirán lastimando a los estadounidenses.
FUENTES:
3 de junio del 2020, Muerte de George Floyd: los números que muestran que la violencia policial en EE.UU. es un «problema de salud pública», BBC Mundo,
Cuentometro 
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